Ella
Hoy os quiero hablar de esta "pequeña criatura", que decía Ismael Serrano en una canción. Que por qué hoy, y en este preciso instante? Pues porque nunca dejará de sorprenderme, y en estos momentos acaba de hacerlo.
Yo tengo una alarmita puesta en el móvil para compar unas entradas que me salta cada poco tiempo, a lo cual estoy tan acostumbrada que cada vez que la oigo la apago instintivamente. Bueno, pues hace unos escasos minutos ha vuelto a sonar, he ido a apagarla, y en el mensaje de recordatorio lo que me he encontrado ha sido una preciosa muestra de cariño de mi bonita amistad. Cómo os habríais sentido si, en un día de resaca de fin de semana de bajón, os aparece de repente en la pantalla del móvil el cariñoso mensaje: "El simio te quiere"? Pues vosotros no sé, panda de insensibles, pero a mí me ha emocionado mucho... Claro, lo malo es que en ese momento te apetece pegarle un abrazo como el que le dabas todos los fines de semana al final de cada función, pero va a ser que no, porque ella estará en el cole aguantando estoicamente las clases mientras tú te dedicas a hacer una paradita en tu análisis para decirle lo mucho que la quieres y necesitas. Uy, mira, acaba de salir otra vez!! Está bien eso de que tu agenda te recuerde que tienes a gente que te quiere.
En fin, sólo quería darle las gracias a esa personita que me hacía compañía en las escaleras cuando no tocaba salir a escena y todo el mundo estaba al otro lado del escenario, o encima de él. Al simio al que colocaba "la melena" para que no se le viera la coleta auténtica que se escondía debajo; al que ayudaba con todo el cariño y la ilusión a colocarse las manos de látex (aunq ella pensara lo contrario); a la que casi ahogaba con mi abrazo al salir a saludar, porque descargaba toda la emoción acumulada en la representación; mi compañera de urnas que hacía más leve el no poder estar ahí arriba con los demás cuando se cerraba el telón por última vez; esa pequeña gran amistad que se forjó sobre las tablas gracias a las líneas que Pratchett escribió para nosotras (mis preferidas), y se consolidó en una loca fiesta univesitaria de confesiones. A la que vigila mis sueños cada noche, a mi apoyo cuando he estado de bajón, y a esa carita que me hace sonreir a la vida cada vez que la miro. Porque la vida es infinitamente mejor cuando estás a su lado.
"Somos ángeles de un solo ala. Necesitamos abrazarnos a alguien para poder volar"
Mírenla. Mírenla y díganme si no es un ángel. Mi ángel. Te quiero!
Yo tengo una alarmita puesta en el móvil para compar unas entradas que me salta cada poco tiempo, a lo cual estoy tan acostumbrada que cada vez que la oigo la apago instintivamente. Bueno, pues hace unos escasos minutos ha vuelto a sonar, he ido a apagarla, y en el mensaje de recordatorio lo que me he encontrado ha sido una preciosa muestra de cariño de mi bonita amistad. Cómo os habríais sentido si, en un día de resaca de fin de semana de bajón, os aparece de repente en la pantalla del móvil el cariñoso mensaje: "El simio te quiere"? Pues vosotros no sé, panda de insensibles, pero a mí me ha emocionado mucho... Claro, lo malo es que en ese momento te apetece pegarle un abrazo como el que le dabas todos los fines de semana al final de cada función, pero va a ser que no, porque ella estará en el cole aguantando estoicamente las clases mientras tú te dedicas a hacer una paradita en tu análisis para decirle lo mucho que la quieres y necesitas. Uy, mira, acaba de salir otra vez!! Está bien eso de que tu agenda te recuerde que tienes a gente que te quiere.
En fin, sólo quería darle las gracias a esa personita que me hacía compañía en las escaleras cuando no tocaba salir a escena y todo el mundo estaba al otro lado del escenario, o encima de él. Al simio al que colocaba "la melena" para que no se le viera la coleta auténtica que se escondía debajo; al que ayudaba con todo el cariño y la ilusión a colocarse las manos de látex (aunq ella pensara lo contrario); a la que casi ahogaba con mi abrazo al salir a saludar, porque descargaba toda la emoción acumulada en la representación; mi compañera de urnas que hacía más leve el no poder estar ahí arriba con los demás cuando se cerraba el telón por última vez; esa pequeña gran amistad que se forjó sobre las tablas gracias a las líneas que Pratchett escribió para nosotras (mis preferidas), y se consolidó en una loca fiesta univesitaria de confesiones. A la que vigila mis sueños cada noche, a mi apoyo cuando he estado de bajón, y a esa carita que me hace sonreir a la vida cada vez que la miro. Porque la vida es infinitamente mejor cuando estás a su lado.
"Somos ángeles de un solo ala. Necesitamos abrazarnos a alguien para poder volar"
Mírenla. Mírenla y díganme si no es un ángel. Mi ángel. Te quiero!
2 comentarios
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Mil gracias, chiquitina.
Simio -